De cara al horizonte: mayo 2009

lunes, 25 de mayo de 2009

Soy yo

Estoy harto. Alabad a la gente, decidles lo que valen, las cosas buenas que tienen, y todos te dirán que no es para tanto, que los hay mejores que ellos. Todos temen que los señalen por creerse más que nadie. Parece que nos obligan a agachar la cabeza, a tenerla escondida y no decir nada, no vaya a ser que nos digan algo o nos paren los pies, o me recuerden que también hago cosas mal. ¡Mierda para todo ellos! ¿Sabéis lo que os digo? Que yo estoy harto de agachar la cabeza, que si hago cosas bien lo digo bien alto y me lo creo, que lo hago bien, que soy especial por ello. ¿Y si hago cosas mal? ¡También! Que es muy dificil ser yo, es difícil hacer las cosas tan bien como las hago yo pero también es difícil hacerlas igual de mal que yo. Que yo la cago de una forma especial y eso es lo que me diferencia y por eso estoy orgulloso de ser yo y de gritar lo que hago bien y lo bien que hago las cosas mal. Que ser uno mismo es muy difícil, y ya quisiera ver yo a otro haciendo lo que hago yo. Tampoco me refiero a que haya que ir por la vida de prepotente, pero como ya he dicho alguna vez, el punto intermedio existe.

lunes, 18 de mayo de 2009

Reflexión (lo primero) y comentario crítico (lo segundo) qué grillado estoy :S XD

La mente es impulsiva, la vida del hombre son impulsos inexplicables, irracionales, pero naturales. En su día a día, el hombre se esfuerza por contener sus impulsos, reprimirlos, encorsetarlos. Es ahí cuando surge el conflicto. El hombre trata de desnaturalizar su vida, convertirla en artificial, vida que de sí es natural. Cuando el hombre encuentra el equilibrio justo entre impulso y vida en sociedad, la naturalidad de la vida fluye contenidamente y el hombre se siente e armonía con el mundo que le rodea, con su vida y consigo mismo. Pero cuando sus impulsos son incontenibles e irrefrenables, la vida social se hace imposible. El todo o nada no es la única posibilidad válida, el equilirio es otra opción igual de válida y en muchas ocasiones la más conveniente. Estoy harto de pensar en todo lo que hago, de analizar todo lo que digo, de darle mil vueltas a lo que pienso. A veces querría decir basta, gritar cuando y donde me plazca, apoderarme de mi vida y vivirla tal y como yo quiero. Porque un "no quiero" es vivir, porque un "te quiero" no se piensa, se siente.

Lo has conseguido. Me has demostrado que ya no puedo confiar en ti que me puedo esperar lo peor. Has minado mi moral, mi fe hermética e indestructible en ti, en tu existencia y en tu lealtad a tu deber. Ya no puedo engañarme por más tiempo, he de abrir los ojos, ver y escuchar lo que el mundo me muestra. No existes o no eres fiel a ti misma, no eres mas que el eco de un mito pasado, te has corrompido y tu significado ya no es el mismo. Día a día me lo demuestras, te empecinas en enseñarme tal y como eres. No te detienes ante nada ni ante nadie, nada sacia tu sed, tu ansia de más. Has dado paso a un monstruo que deja su rastro de terror allá por donde pisa. Ayer en América, mañana quien sabe. Hoy estás en Gaza jugando a ser Dios, quitándole la vida incluso a quien todavía no ha podido ser consciente de ella. Tozuda e irracionalmente insistes en quedarte allí, pisando reiteradamente donde tu huella ya lleva marcada años y años. Pero no solo estas destruyendo edificios y vidas, estas destruyéndote a ti misma. Has perdido tu dignidad en algún lugar hace mucho tiempo. Pero veo que ya no te importa. Aun así, egocéntrica como eres, no sabes que no eres la única. Aunque tu sigas tercamente intentando llevarme al horror de la indiferencia, a la mísera insensibilidad, no podrás. La humanidad no es lo único que queda. La solidaridad, el respeto, la responsabilidad... Mientras tu derramas sangre por donde pasas, yo daré la mía hasta la extenuación para demostrarme a mí mismo y a cuantos me rodean que estas condenada a morir.